Cuántas veces hemos escuchado que los niños son más creativos, y pierden sus facultades a medida que van creciendo. Han sido muchas voces, como la de Ken Robinson, (siempre mencionáis en los foros) que advierten que el sistema educativo mata o, al menos, coarta la creatividad de los niños.
¿Son los niños más creativos que los adultos? ¿Cómo es esto posible, si los adultos somos estos mismos niños crecidos? ¿No deberíamos ser más creativos habiendo adquirido aún más habilidades, conocimientos y experiencias?
Se trata de una extraordinaria capacidad para pensar fuera de esta
caja, en la que nos encontramos cómodos la mayoría de los adultos. Como bien
afirma, Dra. Pérez, catedrática de Teoría de la Educación:
"En la escuela se enseña al niño a amoldarse a los patrones establecidos, a adoptar un pensamiento convergente en lugar de divergente; al profesor le interesa que los niños contesten lo que se espera acerca de determinados contenidos y que los estudiantes no se salgan de las rutas trazadas”.
La mente de los niños es como una hoja en blanco, que aún no ha sido contaminado de prejuicios, miedos y estereotipos. Es cierto que hemos sido educados para ser dóciles y no salir de límites. Según el Profesor Alberca:
“Si un maestro pide a un niño que dibuje un paisaje y el crío es muy original y pinta todo de negro, el profesor le rectifica; el profesor no está preparado para ser sorprendido y, habitualmente, no le gusta ser sorprendido; el profesor quiere que las respuestas en los ejercicios se ajusten a lo que dice el libro o él ha explicado, y eso limita el potencial de los niños, los hace más torpes y menos inteligentes porque utilizan poco la imaginación, no se les deja ser creativos, y así pasa que, cuando salen de primaria, y aún más de secundaria, son menos creativos que cuando llegaron a la escuela”
Tal como hemos reflexionado en el foro de la asignatura, viendo la entrevista de Punset a Ken Robinsón en el programa REDES, hemos llegado a la conclusión de que todos podemos ser creativos, ya que forma parte de nuestra naturaleza, evolucionamos gracias a la creatividad y esta capacidad del ser humano de adaptarse a diferentes circunstancias. Aunque unas personas, un grupo, una circunstancia o un producto, pueda considerarse creativo (ver las clases del tema 13 y 14). En conclusión, no es la mente del niño la que tiene otras funciones o capacidades creativas más desarrolladas que el adulto, simplemente, ellos tienen una mente libre de prejuicios y exploran, experimentan y crean "Out of the Box", lo que hace que sean capaces de producir ideas más frescas y divergentes.
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