La práctica educativa no puede dar la espalda a la creatividad. Las clases no pueden ser explicaciones magistrales, donde el alumno es el ejecutor de las órdenes de su maestro. La mayoría de los contenidos pueden abordarse creativamente evitando un aprendizaje mecánico. El docente debe estar sensibilizado hacia una estimulación creativa. Cada alumno tiene un ámbito en el cual es el mejor y si se le reconoce, se sentirá más apreciado.
El docente basándose en sus competencias, en el conocimiento de sus alumnos, debe diseñar una serie de estrategias de enseñanza innovadores donde guíe al alumno a descubrir y alcanzar el conocimiento, utilizando metodologías innovadoras como cooperativo, aprendizaje basado en proyectos, en competencias, pedagogía inversa…
Un profesor creativo debe enseñar recursos para que encuentren fácilmente la información, y que ellos trabajen desde una perspectiva creativa, para conseguir el potencial creativo de cada alumno. Promoviendo un aprendizaje vivencial, donde el aula sea un laboratorio de experiencias. Está abierto a los cambios adaptándose fácilmente a lo nuevo.
Cada alumno potenciará su creatividad a un ritmo diferente, dependerá de su personalidad, de sus procesos emocionales o del pensamiento divergente
También la evaluación debe dejar de ser exclusivamente memorística para ser más abierta, apreciando el logro de los aprendizajes de los alumnos.
Por otro lado la educación no es algo aislado, las familias son parte necesaria en el aprendizaje del alumno. Es un contexto privilegiado para estimular la curiosidad y la imaginación.
El potencial creativo en este sentido se ve muy determinado por los estímulos, recursos o experiencias que la familia ofrezca al niño o las percepciones de los padres sobre las habilidades de los hijos. Escuela y familia, deben ir de la mano, las familias deben estar implicados en el contexto escolar. Involucrar a las familia en el proceso educativo es fundamental, porque en la escuela y en la familia se llevan a cabo acciones educativas de forma conjunta con repercusión positiva para el alumnado.
Los siguientes enlaces me parecen interesantes y reflejan lo expuesto anteriormente.
Zombies en la escuela
https://www.youtube.com/watch?v=g6zBmBUOMhY&list=RDCMUCsT0YIqwnpJCM-mx7-gSA4Q&index=2
¿Por qué innovar en educación?
https://www.youtube.com/watch?v=TAi2hDbdGvM
¿Cómo cambiar el paisaje de la educación?
Gracias Nicolasa por las interesantes referencias. Revisa este vídeo que te va a interesar.
ResponderEliminarBuenas tardes, me ha gustado mucho tu participación y tus reflexiones Nicolasa. Estoy totalmente de acuerdo con tu forma de ver la educación. En el Real Decreto 157/2022, de 1 de marzo, pero también en Reales Decretos anteriores, aparecen términos tales como innovación, docente guía, competencias clave, etc. Como fin de la educación se puede leer lo siguiente: “La finalidad de la Educación Primaria ...con el fin de garantizar una formación integral que contribuya al pleno desarrollo de su personalidad…” (Real Decreto 157/2022, de 1 de marzo por el que se establecen la ordenación y las enseñanzas mínimas de la Educación Primaria, artículo 4, pág. 3, 4). Además también se habla de unos principios pedagógicos basados en la inclusión, en aprendizajes significativos, habla de la resolución colaborativa de problemas a través de la realización de proyectos significativos para el alumnado (Real Decreto 157/2022, de 1 de marzo por el que se establecen la ordenación y las enseñanzas mínimas de la Educación Primaria, artículo 6, pág.4). Por tanto se entiende al alumno/a desde una concepción holística, siendo vital el saber, el saber hacer y el querer hacer. Se introducen términos como aprendizaje activo; el “learning by doing” (Schank, Berman, y Macpherson, 1999) , “action learning” y “experiencial learning” son teorías que defienden que se aprende a través de la práctica y la experiencia, citando a Schank y Cleary, 1995, p. 74. “Sólo hay una forma eficaz de aprender cómo hacer algo y es haciéndolo”. Otra teoría que apoya la aplicación de metodologías activas, es la de Howard Gardner (1983), que supuso un cambio en la forma de enteder cómo se aprende. Y es que la inteligencia no es algo estanco, sino que está formada por un conjunto de varias inteligencias, que tienen conexión entre sí, y que en función de unos factores, los individuos desarrollan en mayor o menor medida unas y otras. Teniendo en cuenta todo lo anterior, trabajamos con un grupo de niños y niñas diferentes, que tienen inquietudes y motivaciones distintas, gustos diferenciados, que crecen y se desarrollan en un entorno social, cultural y familiar con unas características determinadas. Por lo tanto, hay que dar respuesta a sus necesidades a través de la diversidad de actividades, de herramientas, haciendo un trabajo de guía y mediador. Y es, en este punto, fundamental hablar también de la evaluación, como lo ha hecho Nicolasa. Según la normativa, la evaluación debe ser continua, global y formativa, no puede ser la mera repetición o escritura de un proceso memorístico, sino que se debe ir produciendo a partir de la recogida de información, a través de diferentes herramientas, siendo el objetivo último guiar y reorientar la acción educativa para que el alumnado pueda conseguir los objetivos propuestos y, por tanto, pueda aprender de forma significativa. En relación a ello, hay que hacer referencia al “cono del aprendizaje” (Edgar Dale, en 1946, Audio Visual Methods of Teaching), se establece que, después de pasadas dos semanas retenemos un 10% de lo que leemos pero hasta un 90% de lo que decimos y hacemos. Asimismo, somos capaces de retener un mayor porcentaje cuando somos sujetos activos en las actividades (participando y haciendo. Por ejemplo: obras de teatro, participar en debates, etc. ). Creo que queda demostrado que las niñas y niñas deben aprender haciendo, pero debe resultarles motivador y atractivo.
ResponderEliminar“Dime y lo olvido, enséñame y lo recuerdo, involúcrame y lo aprendo” (Benjamin Franklin, 1706-1790).
Buenos días, me parece muy oportuna tu aportación. Es cierto que nosotros los maestros debemos de fomentar la creatividad, tendiendo muy en cuenta los intereses de nuestros alumnos/as. Debemos de tener siempre presente sus intereses y motivaciones y tomarlo como punto de partida de esta manera fomentaremos su ilusión y ganas de aprender.
ResponderEliminarBajo mi punto vista, tanto la familia como las instituciones cuentan con un papel muy importante en el el proceso de enseñanza-aprendizaje. Las familias también deben de fomentar la creatividad en la vida cotidiana con las oportunidades que se presentan en su contexto haciendo partícipe a sus hijos/as en todo lo posible y en la medida adecuada, siempre que la situación se óptima para el niño/a. Y por otra parte las instituciones deben de proporcionar tanto los recursos humanos como materiales que fomenten la creatividad. Ambos son un apoyo muy importante para nuestra labor.
Gracias por tu aportación